Mudarse con tu pareja.

Mudarse con tu pareja.
Un paso muy grande dentro de la relación, el cual no debe precipitarse. Lo pida quien lo pida, ambos deben de estar totalmente seguros de querer hacerlo. No sólo es un gran compromiso para la relación, sino que es un gran compromiso entre dos personas, vivir con alguien más es toda una aventura, sean sólo roomies o tu pareja sentimental. Claro que, si hablamos de novios, la cosa siempre se complica más, por eso siempre deben.

Esperar al momento adecuado:

Si bien y no podemos medir el estar listo con el tiempo, porque no importa cuanto lleven en la relación, lo que importa es la madurez y el compromiso de ambos. Lo que sí podemos hacer es evaluar el estado en el que se encuentran como pareja. ¿Ya han dormido juntos?, ¿ya se han quedado varios días en la casa del otro?, ¿han tenido viajes largos como pareja?

Todo esto influye en la toma de decisión. Si ya han hecho una o todas estas cosas, lo más probable es que no estén hablando por hablar y se encuentren listos o muy próximo a estarlo. Vivir con tu pareja debe ser un paso muy hermoso, quieres llevar la relación hacia adelante, quieres regresar del trabajo y encontrarte con esa persona especial, desayunar juntos todas las mañanas y contarse su día en persona antes de dormir.

Pero también es dividirse los gastos. De los servicios, de la renta, la despensa, etc. El pagar los recibos a tiempo, el dormir juntos pero que las alarmas suenen a distintas horas. Lavar los platos, hacer el aseo, decorar el hogar, limpieza y organización, tardarse bañándose, compartir baño, etc.

Tal vez éste último siendo uno de los más importantes y difíciles para las personas. Que tu pareja sepa, te escuche y comparta el mismo baño contigo, si aún no cruzan esa línea antes de vivir juntos, prepárense cuando lo hagan, porque no hay marcha atrás, por eso es tan importante.

Ponerse de acuerdo:

De todo, absolutamente de todo. Lo que se mencionó arriba y lo que no, ya es cosa de ustedes saber lo que hablarán, pero es un gran paso que no debe tomarse a la ligera, por eso tómense su tiempo para sentarse y hablarlo. Planifiquen la mudanza en el futuro cercano, pero con un par de semanas o más para que la idea termine de llenar sus cabezas.

Así descubrirán si hay dudas o inseguridades y podrá solucionarlas o echarse para atrás antes de que sea muy tarde. Porque el no estar listos no es ilegal, tal vez les falta vivir un poco más tiempo a solas. ¿Ya tienen las llaves del departamento del otro? Esto podría ser un buen comienzo, llegar a la hora que sea, el día que sea a la casa del otro. Suena como un buen inicio para prepararse a vivir juntos.

Sea quien sea el que pida mudarse, si la otra persona no está lista y tiene el valor de comunicártelo, no te enojes, no le reclames. Siéntate y escucha el por qué no lo está. O a lo largo de los días evalúa la relación y a ti mismo, tal vez no le estás dando todo lo que necesita, ambos tienen que complementarse. Deben sentirse seguros antes de tomar la decisión, a nadie le gusta sentirse rechazado, pero si lo están haciendo contigo, por algo será.

Eventos extraordinarios:

Hay veces en donde llevas ya varios días o incluso semanas en la casa de la otra persona, puede ser que, terminado ese tiempo, ahora toque en tu casa. Y de repente se pongan a pensar que prácticamente ya están viviendo juntos. No es así.

Es un inicio, es similar pero no es lo mismo. Tal vez ese tiempo les ayude a tomar la decisión o a desacelerar las cosas un momento. No están compartiendo gastos ni las responsabilidades antes mencionadas, pero sí sirve para darse una buena idea de lo que les depara el futuro si deciden juntarse.

Pasarla bien, disfrutar tanto el tiempo que pasan juntos, no significa que estén listos, en lo absoluto. Pero es un buen indicador de que la persona con la que estás, es alguien especial con quien eres compatible viviendo juntos.


Dejar un comentario

Por favor tenga en cuenta que los comentarios deben ser aprobados antes de ser publicados

Este sitio está protegido por reCAPTCHA y se aplican la Política de privacidad de Google y los Términos del servicio.